CUADERNOS

Cuaderno del CPI N°137
FORO PRESIDENCIAL CIUDAD 2030
Los candidatos debaten sobre espacio público, infraestructura y movilidad en las ciudades del país que viene.

La Tercera - Consejo de Políticas de Infraestructura (CPI) - Universidad Central
4 de noviembre de 2021
CANDIDATOS EXPOSITORES: José Antonio Kast (Frente Social Cristiano), Yasna Provoste (Nuevo Pacto Social), Marco Enríquez-Ominami (PRO) y Sebastián Sichel (Chile Podemos Más).
Conducción: Rodrigo Guendelman

Resumen

Los formuladores de políticas están posicionando la Infraestructura Verde (IV) en agenda. IV puede ser entendida como una red de espacios que mantienen, protegen y regeneran la integridad ecosistémica: incluyendo espacios naturales, seminaturales y artificiales. Particularmente, el 72% de los Objetivos de Desarrollo Sostenible están relacionados con infraestructura y a nivel mundial la infraestructura pública sufre una brecha de inversión de USD 2,5 a 3 billones por año. En este sentido, la inversión en infraestructura impulsada por el Estado en el país representa el 2,4% del PIB, de la cual 2,1% es inversión con recursos públicos y 0,3% corresponde a inversión en asociación con recursos privados. Ante prioridades fiscales en competencia, es posible incentivar la inversión en IV con dos propuestas de políticas públicas: Banco de Inversión Verde e Instrumentos de Mitigación del Riesgo (Blended Finance).

SÍNTESIS

La calidad de vida deseable en las ciudades es un tema que ha escalado entre las nuevas preocupaciones de la ciudadanía. La infraestructura de uso público vinculada a esa demanda también está elevando su importancia dentro de la agenda-país en tanto las soluciones a la problemática de ciudad en el país pasan tanto por nuevas obras como por la gestión e institucionalidad que la rodean. El Consejo de Políticas de Infraestructura, CPI, ha venido abordando desde hace ya algún tiempo la temática ciudad - calidad de vida - obras y gestión de la infraestructura, a través de diversos encuentros y documentos. En esta oportunidad, el CPI se suma al interés de La Tercera y la Universidad Central para conocer de primera fuente la visión de cuatro aspirantes a la presidencia del país.

Los cuatro candidatos presidenciales a primera vuelta abordaron con franqueza las inquietudes planteadas en el conversatorio, privilegiando sus preocupaciones y enfoques programáticos, y marcando similitudes y diferencias con los otros candidatos. La violencia presente en muchos barrios es un factor a considerar en cualquier esfuerzo pro calidad de vida, así como la movilidad y accesibilidad. Una primera constatación es que hay una suerte de abandono de ciertos lugares y barrios en las ciudades.

Todos los candidatos coincidieron en que la calidad de vida en las ciudades depende del acceso a vivienda digna en un entorno amigable con áreas verdes, lugares de esparcimiento, movilidad, seguridad y servicios, entre los factores principales. Coincidieron también en que la dura y extendida realidad de los campamentos -80.000 familias en esta condición en el país- requiere un tratamiento preferencial y urgente, y que los terrenos fiscales no ocupados debieran conformar un ?banco de suelos? destinado a fines habitacionales sociales. La solución a los temas de vivienda y ciudad tiene que ver con una ?planificación urbana integral?, como lo sintetizara uno de los candidatos. El derecho constitucional a la vivienda fue respaldado por tres candidatos.

El texto a continuación fue editado y organizado por tema para cada candidato, y corresponde a sus respuestas frente a las diferentes consultas temáticas.

*Por distinto motivos, los otros tres candidatos no estuvieron presentes en la convocatoria. Particularmente, el candidato Gabriel Boric estaba afectado por el Covid en ese momento

EXPOSICIÓN DE JOSÉ ANTONIO KAST

La ciudad del futuro es una ciudad que esté bien conectada, limpia, verde, segura, amable y accesible. El ?derecho a ciudad?, sin embargo, no es asunto que deba estar en la Constitución. Hay quienes plantean que todo debe estar en la Constitución, pero nosotros hemos mirado constituciones de otras naciones donde esto está y la verdad es que de esos países la gente huye. Más allá de los temas que algunos quieren instalar en la Constitución y de la discusión política y legislativa permanente, se trata de hacer ciudades eficientes y enfrentar los problemas reales.

  1. Hoy tenemos un tema con los campamentos, los que han crecido exponencialmente luego de ciertas políticas migratorias fracasadas que hicieron que el precio de las viviendas se elevara, así como las tasas de interés por las medidas populistas del último tiempo. Se requiere un tratamiento distinto. Lo que se necesita es sacarlos de esa condición, llevarlos a lugares con urbanización, contar con alcantarillado, agua potable, luz eléctrica y algún grado de pavimentación. Se trata de radicación y no solamente de erradicación. Aquí la política pública conducente tiene que ver con crear subcentros, avanzar en conectividad, utilizar subsidios transitorios y dar uso a terrenos fiscales existentes o adquiridos para estos fines. No hay que descartar la autoconstrucción. En cualquier caso, se necesita un plan especial para abordar la dolorosa realidad de los campamentos.
  2. Creo que lo cierto es que se requiere de un plan de desarrollo urbano integral, y lo primero que hay que hacer es erradicar la violencia. Se requieren niveles más elevados de integración social y territorial, lo que supone mejorar el transporte público. Tenemos un sistema de transporte que no es bienvenido por la ciudadanía, porque va avanzando pero no con la rapidez que se requiere con el Transantiago y el Metro, tenemos que aumentar las líneas del Metro. Debemos lograr que las ciudades tengan un tamaño ideal, unos 500.000 habitantes, pero con trenes de acercamiento o buena conectividad. Medellín y Barcelona son casos a observar y tener presente.
  3. Hay problemas que afectan a los barrios, como la falta de áreas verdes y áreas comunitarias, tenemos todo un tema con el retiro de basura, tenemos que limpiar los barrios de los grafitis y el retiro de cables. Para hacer una ciudad amable hay que planificarla: transporte, áreas verdes, servicios, espacios públicos con los vecinos, lugares de esparcimiento, entre otros. Otros asuntos de la ciudad también son importantes, por ejemplo el de los residuos y el de la electromovilidad. Además, todo lo que son las energías renovables para ir aplicándose a conjuntos habitacionales, y todo el tema de las aguas servidas. El tema de la calefacción en el sur también lo debemos revisar.
  4. Sobre los terrenos fiscales y su utilización preferente para solucionar los problemas de vivienda y campamentos, quiero decir que más que los trueques y las compras entre ministerios y reparticiones públicas, tan publicitadas muchas veces, acá hay un Presidente de la República que está por sobre los distintos procesos de los ministerios, y lo que no se entiende es que haya disputa entre Bienes Nacionales, Vivienda u otros organismos públicos. Se necesita una autoridad única que ordene la situación. Sobre la construcción, sí creo que hay un problema de burocracia, con años de espera, la burocracia sí influye. Sobre la construcción en estas áreas, existen barrios o ciudades periféricas que se pasan a llevar. Eso es algo que debemos enfrentar. Cuando las inmobiliarias compran distintos terrenos es para saltarse algunas normas establecidas para construir mejor. Queremos tener toda la disponibilidad de terrenos fiscales y una sola autoridad que define esto para evitar los dimes y diretes entre los distintos ministerios. Existen unas 2.000 a 3.000 hectáreas de propiedad del Estado.

EXPOSICIÓN DE YASNA PROVOSTE

Nosotros hemos establecido la aspiración, y no nos cabe duda que estará consagrado en la Constitución, del derecho a la vivienda. Tanto en materia urbana como rural debemos orientarnos a la superación de este paradigma subsidiario en la resolución de problemas.

  1. Es necesario un nuevo modelo de viviendas dignas, asequibles, tomando un rol activo en la gestión de producción de vivienda. Vamos a enfocarnos en impulsar grandes proyectos urbanos y rurales que, además de viviendas, dispongan de espacios públicos, servicios, comercio; se trata de la construcción de un barrio de comunidad. En el marco del cambio climático también es importante reutilizar barrios abandonados o subutilizados que pueden resultar atractivos.
  2. Desde distintas fundaciones nos han colaborado muchísimo, hemos querido colocar una mirada en las ciudades desde la perspectiva de género, porque todo eso influye cuando tenemos ciudades que son mucho más iluminadas y seguras para las mujeres. Asimismo, enfocar el tema de ciudades en relación con la conectividad. Se requiere dar una mirada más integradora, entender que no basta con construir vivienda, sino también barrios seguros, con conectividad y perspectiva de género.
  3. Entiendo que uno de los problemas más relevantes del país es la segregación urbana. Hay una concentración masiva y homogénea de familias vulnerables en zonas alejadas de las oportunidades, alejadas de los centros, con barrios muy encapsulados y con fuertes niveles de delincuencia. La gente gasta más de la mitad de sus sueldos sólo en moverse, eso ya es violento. Tenemos que trabajar no solo en la conectividad, sino también en los atributos de localización para elevar la calidad de vida y disminuir los viajes innecesarios. Por eso, en nuestro programa hay un plan de fortalecimiento de los barrios con servicios, comercio y Carabineros. También se fomentan los traslados como peatones y transportes como bicicleta. La violencia que se vive en territorios es enorme cuando se vive en zonas sin áreas verdes, más en contexto de emergencia climática.
  4. Sobre la contaminación y las emisiones, iniciaremos una hoja de ruta en nuevas licitaciones para lograr el 100% de buses eléctricos en zonas decretadas como saturadas de contaminación, desde la RM hasta regiones. Al 2035, todos los buses en el país debieran ser eléctricos. Vamos a establecer, además, competencias en los gobiernos regionales y locales para poder determinar zonas cero emisiones mediante la exclusión de vehículos contaminantes, además de prohibir motores innecesarios. Los referentes de ciudades de distintos tamaños y culturas han generado políticas de transporte e impactos muy positivos en la calidad de vida. No podemos perder de foco que tenemos un problema grave de vivienda digna para todos. Debemos ser capaces de abordarlo con extrema urgencia.
  5. Sobre un banco de suelos de terrenos fiscales y su utilización social: no sólo permite romper la segregación y mejorar la equidad, sino también la disponibilidad de viviendas. No comparto la idea de que el problema de déficit de viviendas y retraso de entregas sea mera burocracia, sino que tiene que ver también con la disponibilidad real de suelos en los distintos territorios. Proponemos tener un banco de suelos que tenga atributos de equipamiento para localizar bien las nuevas viviendas. Las familias no pueden esperar más de tres años en lugar de los siete u ocho actuales. Y proponemos un modelo moderno, inclusivo e integrado. En este banco de suelos consideramos la oferta pública a disposición de resolver la primera vivienda de las familias. No hablamos de trueques ni que el Ministerio de Vivienda le compre al de Bienes Nacionales, sino de disponer el terreno público con un propósito, que es superar la grave crisis habitacional. Pero además que se incorpore la posibilidad de compra de privados, para contar con terrenos que permitan superar una de las crisis más violentas y lograr 400.000 nuevas viviendas en cuatro años. Al final, el desafío es de barrios justos, ciudades justas y acogedores, transporte público, nuevas comunidades rurales, con un compromiso con las personas y familias de vivir en lo propio.

EXPOSICIÓN DE SEBASTIÁN SICHEL

El derecho de una vivienda tiene que estar considerado en la Constitución y de hecho está incorporado en los tratados internacionales de las Naciones Unidas en materia de derechos humanos. Espero que quede explicitado en la nueva Constitución.

  1. Existen tres problemas con la vivienda en Chile que resulta urgente resolver. Primero, la lentitud en la entrega de viviendas sociales donde tenemos un taco de ineficiencia burocrática que ha demorado siete años la entrega de una vivienda social. Esperamos reducir esos plazos a dos años, eliminando burocracia y licitando al mismo tiempo el diseño del proyecto y la adjudicación del terreno, aumentando el banco de hectáreas fiscales disponibles, y acelerando los permisos, evitando la duplicidad de permisos entre Seremi y Serviu. Después, está el problema de precios de la vivienda que no necesariamente es para los que están en campamentos y que está gatillado por la actual inflación y que está provocando una tragedia. Debemos establecer un fondo de garantía para la vivienda, que tenga como premisa que el Estado garantice el pie, y que el comprador pueda hacerse un autopréstamo con los fondos de pensión. El tercer problema es que en la construcción se necesita a privados para acelerar la entrega con estándares comunes.
  2. Creo que hemos abandonado a numerosos barrios y los hemos dejado abiertos al narcotráfico, que empieza a reemplazar al Estado cuando el Estado desaparece. Por eso, voy a anunciar la creación de una policía especializada en narcotráfico, pero además hay que recuperar esos barrios para los chilenos. Proponemos 200 microcentros donde el Estado se instale, con servicios que funcionen hasta las 18 horas; necesitamos más recursos y no solo eficiencia. Gran parte de lo que estamos diciendo, de sostener la carga tributaria y aumentarla a mediano plazo, tiene que ver con la disponibilidad de esos recursos, y que los pobres no queden abandonados. También confiar en las organizaciones comunales con recursos del Estado, fortalecer la participación social y orden barrial por medio de las juntas de vecinos. Seguir con el programa ?Quiero mi barrio? y, quizás lo más relevante al final del día, es que vamos a necesitar también a los privados. Hay que modificar la ley de donaciones para que se incentive la inversión de privados.
  3. Tenemos que avanzar a una gestión inteligente de la ciudad, lo que incluye el tema de contaminación. No usamos ni gestionamos de forma inteligente la ciudad, ni siquiera con el comportamiento de pasajeros, y creo que ahí el Estado tiene una deuda gigante de incorporar tecnología en el uso eficiente de la ciudad. También, que cada construcción sea capaz de gestionar los tiempos y residuos que genera y ser responsable. El MOP debe incorporar esos aspectos en las licitaciones de manera que nos obliguemos todos a ordenar los procesos de construcción tanto para la eficiencia de construcción como por los recursos naturales. Siempre he sido partidario de la COP, ojalá se hubiese realizado en Chile en su minuto, tenemos diferencias con algunos candidatos en esto. Chile debe ser líder en sustentabilidad y debe haber economía circular en Chile, ojalá sea parte de la discusión mundial el cómo la construcción se sube al carro.
  4. Sobre el tema del banco de suelos no debe ser sólo que el Ministerio de Vivienda le compre al de Bienes Nacionales, que es una especie de truque presupuestario, sino que efectivamente cuente con 2.000 hectáreas en terrenos fiscales sin uso que deberían estar a disposición y no a precio de mercado. Esa es la prioridad número uno. Los vectores son suelo, el segundo es precio y el tercero es burocracia. Hay que partir por la disponibilidad de suelos y crear un gran banco de suelos, pero también avanzar en un derecho de compra preferente del Estado de terrenos privados, y también avanzar en que cualquier cambio en el uso de suelo en el plano regulador debe incorporar siempre espacios para la construcción de viviendas sociales.

EXPOSICIÓN DE MARCO HENRIQUEZ-OMINAMI

Pensamos que el Estado tiene que jugar un rol, el mercado no es el amo de la ciudad y por cierto que la vivienda debe reconocerse como un derecho. Nosotros queremos una vivienda social decente y vamos a construir 90 mil al año. Es un esfuerzo público y privado inspirado en el acuerdo del Consejo para la Infraestructura que de izquierdista no tiene nada.

  1. Además, vamos a aumentar los subsidios a la clase media. Eso significa un esfuerzo fiscal gigantesco, pero hay una segunda vertiente: el empleo. Construir genera y reactiva la economía, que nos va a sacar de la espiral inflación-déficit fiscal. Lo cierto es que hay algunos barrios que hay que reconstruirlos y reubicarlos y que no están pensados como ciudad. Proponemos un banco de suelos.
  2. Tenemos que equipar la ciudad y los barrios. Lo que tenemos hoy es inhumano e injusto. Nuestras ciudades hoy, y creo que los cuatro estamos de acuerdo, en 2030 tienen que ser muy distintas: a escala humana, sustentables y con equipamiento.
  3. Hay otro concepto que hay que instalar que son los gobernadores. Yo confío en mi pueblo que eligió gobernadores de todos los colores. Quiero gobernar con todos, y los gobernadores deben ser responsables de los territorios. Respecto de los equipamientos, requerimos planificar con el gobernador. Creo que debe haber transporte estatal y no subsidiado como el que tenemos, porque conectar periferia es deber del Estado. En equipamiento hay que avanzar en áreas verdes, ciclovías y bibliotecas. La pregunta es ¿cuál es el brazo? El mercado solo atiende -legítimamente- el lucro, pero eso debe estar al servicio de una planificación, el mercado planifica a su manera. Es esencial la planificación: más Estado, pero con el mercado como aliado.
  4. Las ciudades son factores de contaminación gigantescos, y ahí hay algunas ideas que valen la pena. Primero las áreas verdes, la electromovilidad, los buses eléctricos, avanzar también en transporte estatal subterráneo, que los edificios sean autosuficientes, aislación térmica en viviendas sociales. Hay un conjunto de medidas que tienen que ver con áreas verdes, transporte y vivienda que hacen de las ciudades un espacio distinto. La Constituyente también debe ayudarnos a reordenar las prioridades.